lunes, 6 de junio de 2011

Sapere Aude “Atrévete a Saber”

Sapere Aude “Atrévete a Saber”

Termino provocativo seductor que hace reflexionar y pensar en que hemos olvidado, aquello antiguo, empolvado por tantos siglos que se encontraba frente a nuestros ojos, pero ignorado por la ceguera de la razón y por esa pretensión  de evolucionar sin saber que para crecer y seguir adelante, primero debes conocer el pasado. Proyectar la interrogante de ¿que debemos renovar, resetear o empezar de nuevo?, nos encamina ha redescubrir el origen del conocimiento que la humanidad ha tenido en el pasado, presente y tendrá en el futuro. Quizás la pregunta idónea seria ¿somos capaces de pensar?, ¿es cierto el don dado por Dios, que es el libre albedrío?, o quizás solo ¿somos piezas de ajedrez, peones dirigidos en una tabla de sesenta y cuatro cuadros?

¿Estamos preparados para comenzar de nuevo?

Postular un cambio, nos guiaría a esculcar, desenterrar, voltear hacia el pasado para hacer lo que en tantos años no hemos hecho que es “escuchar y pensar”. He conocido el pensamiento de grandes hombres, que se hicieron estas mismas preguntas y es increíble que su legado ha perdurado tantos años, sus enseñanzas, sus hechos, sus experimentos y sus ideas, y  puedo afirmar que si, si se puede empezar de nuevo, regresar sin retroceder, “a veces el mejor camino es volver….”



Ideas fatales

Muchos hombres han pensado que el poder es algo tan vano, sutil y mundano que solo es posible a través de la fuerza, de la obligación, de la violencia, pero quizás estos hombres no han conocido el precepto de que la mejor arma no son el hierro y el fuego, si no las ideas.

Winston Churchil decía que "Los imperios del futuro, son los imperios de la mente".

Muy cierto por que las ideas son a prueba de fuego, a prueba de balas, son a prueba del tiempo y son quizás la única cosa infinita en este mundo, pues no tienen censura, no se ensucian, no tienen vigencia y lo más importante es que llegan como gotas de agua, a la mente de las sociedades, de los pueblos, del mundo. Aquellos hombres iluminados no hicieron imperios de tierra y oro, si no imperios de inteligencia y sabiduría, imperios infinitos que trascienden en tiempo y espacio, generado por el poder de las ideas. Un hombre proclamo “que la tierra es para quien la trabaja”, hoy yo proclamo “que el conocimiento es para aquel osado que se atreva a reclamarlo, para aquel que quiera empezar de nuevo, para aquel que pretenda trascender, evolucionar y buscar la libertad.






Nada es seguro, todo es posible.

Cada vez que he visto cambiar el mundo, ha sido para generar caos, crisis, violencia o sangre, pero muy raramente también surgen hombres capaces de pensar, de imaginar, de crear y de soñar. Estos “Prometeos, amigos del hombre” han guiado como antorchas luminosas en la oscuridad del mundo.
Seres capaces de crear existencias a través, de todos los sentidos, seres homónimos en grandeza, que han escalado peldaños de la evolución y muestran que existen cosas invisibles al ojo humano, cosas ajenas que a veces no lo son tanto y nos muestran que todo es posible, que existe solo un antiguo y eterno camino, donde sólo hay trabajo, verdad y responsabilidad, pero donde se puede descubrir tanto…!
Que somos parte del todo, y el todo es parte de nosotros, que el átomo mas pequeño esta conectado con la galaxia mas lejana, con el universo, que las ideas fluyen a través de la mente y pueden comunicarse con todo el mundo, que todo esta conectado y vive equilibrado en un solo Ser, en el lenguaje poético se dice, “que no se puede cortar  una flor sin perturbar una estrella”, pues el vivir sin cambiar es morir.






---------------------------------------LAUS DEO-----------------------------------------------

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