sábado, 14 de abril de 2012

Fausto

"POR EL PODER DE LA VERDAD, YO, ESTANDO VIVO, HE CONQUISTADO EL UNIVERSO". ESTA NOCHE LES RECOMIENDO ESTE EXCELENTE LIBRO FAUSTO QUE INTENTA ENGAÑAR AL DIABLO, DEL GRAN JOHANN WOLFGANG VON GOETHE. VI VERI UNIVERSUM VIVUS VICI.

Fausto de Johann Wolfgang von Goethe es una obra trágica enteramente dialogada, concebida más para ser leída que para ser representada (al estilo de La Celestina). Fue publicada en dos partes: Faust: der Tragödie erster Teil (Fausto: Primera parte de la tragedia) y Faust: der Tragödie zweiter Teil (Fausto: Segunda parte de la tragedia). Se trata de la obra más famosa de Goethe y está considerada como una de las grandes obras de la literatura universal.

La Primera parte fue en principio terminada por Goethe en 1806. Su publicación en 1808 fue seguida de una edición revisada en 1828–1829, que sería la última editada por el propio autor. Previamente, había aparecido una versión parcial en 1790 titulada Fausto, un fragmento. Las primeras versiones de la obra, conocidas como el Urfaust, fueron elaboradas entre 1772 y 1775; sin embargo, los detalles de esa elaboración no están enteramente claros.

Goethe terminó de escribir la Segunda parte de Fausto en 1832, el año de su muerte. A diferencia de la Primera parte, el foco de la acción ya no está centrado en el alma de Fausto, que ha sido vendida al diablo, sino más bien en fenómenos sociales como la psicología, la historia y la política. La segunda parte constituyó la principal ocupación de Goethe en sus últimos años y apareció solo póstumamente en 1832.



Karl Marx, Manifiesto Comunista (1848)

Karl Marx


El Manifiesto del Partido Comunista es uno de los tratados políticos más influyentes de la historia, es una proclama encargada por la Liga de los Comunistas a Karl Marx y Friedrich Engels entre 1847 y 1848, publicada por primera vez en Londres el 21 de febrero de 1848.
Las ideas que el Manifiesto expresa son las siguientes:
- La historia política e intelectual de una sociedad está determinada por el modo de producción y la formación socio-económica que se deriva de él.
- Una vez aparecidas las clases sociales sobre la base de la propiedad privada y la explotación, la historia de las sociedades ha sido la historia de la lucha de las clases explotadoras y las explotadas.
- En la actual sociedad moderna el proletariado es la única clase social cuya emancipación significará la emancipación de toda la humanidad mediante la revolución comunista: la abolición de la propiedad burguesa, las clases sociales y el Estado.
Capítulo I:
Burgueses y proletarios
El texto empieza desarrollando la idea de que la historia de la sociedad humana es una historia de luchas de clases opresoras y clases oprimidas, y que en la actual sociedad la humanidad tiende a dividirse entre dos clases antagónicas: burguesía y proletariado. Luego de esto, se hace un repaso histórico desde las últimas épocas de la sociedad feudal hasta la "moderna sociedad burguesa", encontrando en el desarrollo económico el hilo que explica los radicales cambios políticos y culturales que causaron que la segunda surgiera revolucionariamente de la descomposición de la primera.
La historia de la transición entre la sociedad feudal y la sociedad moderna es también la historia del ascenso de la burguesía a clase dominante: desde su surgimiento en las primeras ciudades de la Edad Media, la creación de comunas y municipios independientes, luego su carácter de tercer Estado en las monarquías, hasta que "implantada la gran industria y abiertos los cauces del mercado mundial (...) conquista la hegemonía política y crea el moderno Estado representativo", el cual, según los autores, es "el Consejo de administración que rige los intereses colectivos de la clase burguesa".
Marx y Engels reivindican el papel revolucionario que tuvo la burguesía: "Donde quiera que se instauró, echó por tierra todas las instituciones feudales, patriarcales e idílicas." Al explotar el mercado mundial, la burguesía destruye las trabas nacionales al incremento de la producción y el comercio, subordina o hace desaparecer a las clases feudales, somete al campo a la ciudad, a los "pueblos bárbaros y semibárbaros" a las "naciones civilizadas", y da lugar a un movimiento aglutinador de los medios de producción, la propiedad, y los habitantes de cada país, lo cual, a su vez, conduce a un proceso de centralización política y a un cosmopolitismo cultural. De esta manera, la burguesía crea un único mundo civilizado con su sello de clase.

Pero, al "contrario de cuantas clases sociales la precedieron, que tenían todas por condición primaria de vida la intangibilidad del régimen de producción vigente", la burguesía "no puede existir si no es revolucionando incesantemente los instrumentos de la producción, que tanto vale decir el sistema todo de la producción, y con él todo el régimen social." Y en este desarrollo incesante de las fuerzas productivas Marx y Engels vaticinan que la época de la burguesía tiene un límite en las propias relaciones de producción burguesas. La sociedad feudal debía descomponerse porque sus relaciones de producción obstaculizaban el desarrollo de las fuerzas productivas, lo cual determinó que la burguesía, la representante de estas nuevas fuerzas productivas, tarde o temprano tuviera que entrar en lucha política contra la nobleza y hacerse del poder político para romper esas trabas. Este conflicto entre fuerzas productivas y relaciones de producción estaba volviendo a ocurrir: "Desde hace varias décadas, la historia de la industria y del comercio no es más que la historia de las modernas fuerzas productivas que se rebelan contra el régimen vigente de producción, contra el régimen de la propiedad, donde residen las condiciones de vida y de predominio político de la burguesía." Se cita como ejemplo de ello a las crisis comerciales.

Marx y Engels anuncian que la nueva clase revolucionaria que terminará con el régimen burgués para poner en pie las nuevas relaciones de producción es el proletariado, "esa clase obrera moderna que sólo puede vivir encontrando trabajo y que sólo encuentra trabajo en la medida en que éste alimenta a incremento el capital."

En los párrafos siguientes Marx y Engels describen el mundo industrial en el que vive el proletariado, la tendencia de las clases medias empobrecidas a engrosar sus filas, y la historia de su lucha contra el régimen burgués de producción, que ha ido desde la confrontación aislada entre obreros y burgueses individuales hasta llegar a la confrontación de las dos clases. Es el mismo desarrollo acelerado de la industria el que nivela las condiciones obreras, cohesiona a los proletarios, y presenta su asociación de clase como primera necesidad para la lucha por sus intereses sociales, contrarios a los de la clase de los burgueses.

Sin embargo, la revolución proletaria no tiene objetivos similares a los que tuvo la revolución burguesa: "Todas las clases que le precedieron y conquistaron el Poder procuraron consolidar las posiciones adquiridas sometiendo a la sociedad entera a su régimen de adquisición. Los proletarios sólo pueden conquistar para sí las fuerzas sociales de la producción aboliendo el régimen adquisitivo a que se hallan sujetos, y con él todo el régimen de apropiación de la sociedad. Los proletarios no tienen nada propio que asegurar, sino destruir todos los aseguramientos y seguridades privadas de los demás. (...) Hasta ahora, todos los movimientos sociales habían sido movimientos desatados por una minoría o en interés de una minoría. El movimiento proletario es el movimiento autónomo de una inmensa mayoría en interés de una mayoría inmensa. El proletariado, la capa más baja y oprimida de la sociedad actual, no puede levantarse, incorporarse, sin hacer saltar, hecho añicos desde los cimientos hasta el remate, todo ese edificio que forma la sociedad oficial."

Los autores terminan este capítulo señalando la muerte histórica de la burguesía y la victoria del proletariado como "igualmente inevitables" debido a la incapacidad de la burguesía para elevar las condiciones de vida del proletariado que, lejos de ello, decaen constantemente producto del desarrollo de la gran industria dentro del régimen de producción burgués.
 Capítulo II
Proletarios y comunistas
Los autores dejan claro que los comunistas "No tienen intereses propios que se distingan de los intereses generales del proletariado. No profesan principios especiales con los que aspiren a modelar el movimiento proletario." y que "El objetivo inmediato de los comunistas es idéntico al que persiguen los demás partidos proletarios en general: formar la conciencia de clase del proletariado, derrocar el régimen de la burguesía, llevar al proletariado a la conquista del Poder." Lo que distingue a comunistas de proletarios es "que destacan y reivindican siempre, en todas y cada una de las acciones nacionales proletarias, los intereses comunes y peculiares de todo el proletariado, independientes de su nacionalidad, y en que, cualquiera que sea la etapa histórica en que se mueva la lucha entre el proletariado y la burguesía, mantienen siempre el interés del movimiento enfocado en su conjunto. "

Los autores describen la teoría del comunismo empezando por resumirla en la fórmula: "abolición de la propiedad privada", pero aclarando que no se refieren a "la abolición de la propiedad en general, sino la abolición del régimen de propiedad de la burguesía, de esta moderna institución de la propiedad privada burguesa, expresión última y la más acabada de ese régimen de producción y apropiación de lo producido que reposa sobre el antagonismo de dos clases, sobre la explotación de unos hombres por otros." A continuación, en forma polémica con interlocutores imaginarios, los autores responden a "los reproches de la burguesía contra el comunismo": abolición de la propiedad, del trabajo, de la familia, de la nacionalidad, de la individualidad, etc. La respuesta a cada objeción aclara que lo que se busca abolir es la forma burguesa que adoptan todas estas instituciones. En cada caso los autores demuestran cómo estas acusaciones tópicas contra el comunismo, cuando no son directamente calumnias, son una defensa más o menos velada de los intereses de clase de la burguesía haciéndolos pasar por intereses de toda la sociedad.

Más adelante los autores, sin "entrar a analizar las acusaciones que se hacen contra el comunismo desde el punto de vista religioso-filosófico e ideológico en general", señalan la base de las ideas de cada época en "las condiciones de vida, las relaciones sociales, la existencia social del hombre", desmintiendo la existencia de "verdades eternas", y concluyendo "Las ideas imperantes en una época han sido siempre las ideas propias de la clase imperante".

Como terminación de este capítulo, Marx y Engels vuelven al punto de la conquista del poder político por el proletariado como primer paso de la revolución obrera. Señalan como tarea del proletariado erigido en clase dominante el centralizar los medios de producción "en manos del Estado, es decir, del proletariado organizado como clase gobernante" (en el prólogo a la edición alemana de 1872, luego de la experiencia de la Comuna de París, los autores dirían que "la clase obrera no puede limitarse a tomar posesión de la máquina del Estado en bloque, poniéndola en marcha para sus propios fines", de manera que esta identidad entre Estado y proletariado organizado como clase gobernante es incorrecta).

A continuación los autores esbozan un programa general de expropiaciones, políticas fiscales, medidas jurídicas y reorganización de la economía y de la educación a ser aplicado por el proletariado erigido en clase dominante. Por último matizan que, si bien el proletariado, en lucha contra la burguesía, se ve obligado a la conquista del poder político, una vez "hayan desaparecido las diferencias de clase y toda la producción esté concentrada en manos de la sociedad", la hegemonía política de clase del proletariado dejará de ser necesaria, "Y a la vieja sociedad burguesa, con sus clases y sus antagonismos de clase, sustituirá una asociación en que el libre desarrollo de cada uno condicione el libre desarrollo de todos."
Capítulo III: Literatura socialista y comunista
Entre la nebulosa de propuestas socialistas de la época, los autores del Manifiesto destacan varias tendencias que clasifican en tres: el socialismo reaccionario, el socialismo burgués o conservado, y el socialismo y comunismo crítico-utópicos.
Por socialismo reaccionario Marx y Engels entendían a aquellas variantes de socialismo que, pretendiendo representar intereses obreros, representaban intereses de clases pre-capitalistas. En el socialismo feudal, se trataba de los sectores de la aristocracia desplazada del poder por la burguesía, con los que confluían sectores del clero.
En el socialismo pequeñoburgués, se trata de sectores de las clases medias, condenadas a engrosar el proletariado, que critican al régimen burgués desde los intereses de los pequeños burgueses y los campesinos. Como su principal representante, señalan a Sismondi. Sus méritos residen en la crítica correcta del régimen de producción burgués y sus consecuencias antisociales. Pero en cuanto a sus propuestas positivas, no pasan de un retorno a los antiguos medios de producción y de cambio, con el modo de vida asociado a ellos.
Por último, el socialismo alemán o "verdadero socialismo" surge a partir de la importación en Alemania de la literatura socialista y comunista francesa. Pero como en Alemania las condiciones sociales eran bastante más feudales que las francesas, esto resultó en una asimilación puramente literaria del socialismo en el marco de una conciencia filosófica reaccionaria. "Y así, donde el original desarrollaba la crítica del dinero, ellos pusieron: “expropiación del ser humano”; donde se criticaba el Estado burgués: “abolición del imperio de lo general abstracto”, y así por el estilo. ". Este socialismo vino como anillo al dedo para que la pequeña burguesía alemana fustigara tanto al comunismo proletario como al liberalismo burgués, y por lo tanto se convirtió en un arma de la reacción aristocrática y feudal.
Socialismo conservador o burguésEsta ideología proviene de la sensibilización de parte de la burguesía ante el sufrimiento del proletariado y un intento de mitigar estas injusticias para conservar el orden social burgués.

"Se encuentran en este bando los economistas, los filántropos, los humanitarios, los que aspiran a mejorar la situación de las clases obreras, los organizadores de actos de beneficencia, las sociedades protectoras de animales, los promotores de campañas contra el alcoholismo, los predicadores y reformadores sociales de toda laya. "

Socialismo y comunismo crítico-utópicos
En este socialismo se encuentran las doctrinas y sistemas características de los primeros choques del proletariado como clase contra el régimen burgués. Estas doctrinas realizan una crítica medianamente correcta del mundo burgués y profesan "un ascetismo universal y un torpe y vago igualitarismo" o diseñan modelos de sociedades futuras de carácter utópico.

 Capítulo IV: Actitud de los comunistas ante los otros partidos de la oposición
En este breve último capítulo -que ya en el prólogo de 1872 los autores señalan como desactualizado debido a la desaparición de muchos de los "partidos de oposición" aquí nombrados y a los cambios económicos y políticos ocurridos desde su publicación- Marx y Engels hacen un esbozo de la táctica que deben seguir los comunistas en el contexto político de varios países de Europa: en donde no sea posible llevar a cabo directamente su objetivo, situarse de parte de los partidos más progresivos y contra los más reaccionarios, sin por ello perder su independencia programática y organizativa.
"Resumiendo: los comunistas apoyan en todas partes, como se ve, cuantos movimientos revolucionarios se planteen contra el régimen social y político imperante. "

Este capítulo, y el manifiesto, termina con la siguiente arenga:
"Los comunistas no tienen por qué guardar encubiertas sus ideas e intenciones. Abiertamente declaran que sus objetivos sólo pueden alcanzarse derrocando por la violencia todo el orden social existente. Tiemblen, si quieren, las clases gobernantes, ante la perspectiva de una revolución comunista. Los proletarios, con ella, no tienen nada que perder, como no sea sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo entero que ganar.

¡Proletarios de todos los Países, uníos! . " ...
Karl Marx pudo haberse equivocado con el comunismo pero, en lo que se refiere al capitalismo, mucho de lo que dijo resultó ser correcto, como señala el filósofo John Gray, quien escribió este artículo para la BBC.
Como efecto secundario de la crisis financiera, más y más gente está dándose cuenta de que Karl Marx estaba en lo cierto.
El gran filósofo alemán del siglo XIX, economista y revolucionario, pensaba que el capitalismo era radicalmente inestable.
Tenía incorporada la tendencia de producir auges y colapsos cada vez más grandes y profundos y, a largo plazo, estaba destinado a destruirse a sí mismo.
A Marx le complacía esa característica: estaba seguro de que habría una revolución popular, la cual engendraría un sistema comunista que sería más productivo y mucho más humano.
Marx erró en lo que se refiere al comunismo. Pero su percepción de la revolución del capitalismo fue proféticamente acertada.
No fue sólo sobre el hecho de que en ese sistema la inestabilidad era endémica, aunque en ese respecto fue más perspicaz que la mayoría de los economistas de su época y de la actualidad.
A un nivel más profundo, Marx entendió cómo el capitalismo destruye su propia base social: la forma de vida de la clase media.
La terminología marxista de burgueses y proletariado suena arcaica.
Pero cuando argumentó que el capitalismo hundiría a la clase media en algo parecido a la existencia precaria de los angustiados trabajadores de su época, Marx anticipó un cambio en la manera en la que vivimos que apenas ahora estamos teniendo que afrontar.

Destrucción creativa
Chico sentado en las piernas de la estatua de Marx
A pesar de que se equivocó, Marx pronosticó lo que iba a suceder.
Para Marx, el capitalismo era la teoría económica más revolucionaria de la historia, y no hay duda que difiere radicalmente de los sistemas previos.
Las culturas de los cazadores-recolectores persistieron con su forma de vida por miles de años, las esclavistas por casi el mismo tiempo y las feudales por muchos siglos. En contraste, el capitalismo transforma todo lo que toca.
No son sólo las marcas las que cambian constantemente. Compañías e industrias se crean y se destruyen en una corriente incesante de innovación, mientras que las relaciones humanas se disuelven y reinventan en formas novedosas.
El capitalismo ha sido descrito como un proceso de destrucción creativa, y nadie puede negar que ha sido prodigiosamente productivo.
Prácticamente todos los que viven en países como el Reino Unido hoy en día reciben ingresos reales más altos de los que habrían recibido si el capitalismo no hubiera existido nunca.
El problema es que entre las cosas que se han destruido en el proceso está la forma de vida de la que, en el pasado, había dependido el capitalismo.

La promesa...
Los defensores del capitalismo argumentan que le ofrece a todos los beneficios que en la época de Marx sólo tenían los burgueses, la clase media asentada que poseía capital y tenía un nivel razonable de seguridad y libertad durante su vida.
El negocio de los mercados es volátil, y ahora estamos sintiendo las consecuencias.
En el capitalismo del siglo XIX, la mayoría de la gente no tenía nada. Vivían de vender su labor y cuando los mercados se debilitaban, enfrentaban dificultades.
Pero a medida que el capitalismo evolucionó -dicen sus defensores-, un número mayor de personas se beneficiaron.
Carreras satisfactorias dejaron de ser la prerrogativa de unos pocos. La gente dejó de tener dificultades todos los meses por vivir de un salario inseguro. Las personas estaban protegidas por sus ahorros, la casa que poseían y una pensión decente, así que podían planear sus vidas sin temor.
Con la expansión de la democracia y la riqueza, nadie se iba a quedar sin una vida burguesa. Todos podían ser clase media.


La realidad
De hecho, en el Reino Unido, Estados Unidos y muchos otros países desarrollados, durante los últimos 20 a 30 años ha ocurrido lo opuesto.
No existe la seguridad laboral, muchas de las profesiones y oficios del pasado desaparecieron y carreras que duran toda la vida no son mucho más que un recuerdo.
Si la gente posee alguna riqueza, está en sus casas, pero los precios de la propiedad raíz no siempre aumentan. Cuando el crédito es restringido, como ahora, pueden quedarse estancados por años. Una menguante minoría puede seguir contando con una pensión con la cual vivir cómodamente y pocos cuentan con ahorros significativos.
Más y más gente vive al día, con muy poca idea sobre qué traerá el futuro.
La clase media solía pensar que sus vidas se desenvolverían en una progresión ordenada, pero ya no es posible considerar a la vida como una sucesión de niveles en los que cada escalón está más arriba que el anterior.
En el proceso de creación destructiva, la escalera desapareció y para cada vez más personas, ser de clase media ya no es siquiera una aspiración.


Ganancia negativa
A medida que el capitalismo ha ido avanzado, ha llevado a la mayoría de la gente a una nueva versión de la precaria existencia del proletariado del que hablaba Marx.
Gray anticipa más disturbios debido a dificultades financieras.
Los salarios son más altos y, en algunos lugares, en cierto grado hay un colchón contra los sacudones gracias a lo que queda del Estado de bienestar.
Pero tenemos poco control efectivo sobre el curso de nuestras vidas y las medidas tomadas para lidiar con la crisis financiera han profundizado la incertidumbre en la que tenemos que vivir.
Tasas de interés del 0% conjugadas con el alza de precios implica que uno recibe beneficios negativos por su dinero y produce la erosión del capital.
La situación para muchos jóvenes es aún peor. Para poder adquirir las habilidades indispensables para conseguir empleo, hay que endeudarse. Y como en cierto momento hay que volverse a entrenar, hay que ahorrar, pero si uno empieza endeudado, eso es lo último que podrá hacer.
Cualquiera que sea la edad, la perspectiva de la mayoría de la gente hoy en día es una vida entera de inseguridad.


Quienes se arriesgan
Al mismo tiempo que ha despojado a la gente de la seguridad de la vida burguesa, el capitalismo volvió obsoleto al tipo de persona que disfrutaba de la vida burguesa.
En los '80s se habló mucho de los valores victorianos, y los promotores del mercado libre solían asegurar que éste reviviría las virtudes del pasado.
Pero el hecho es que el mercado libre socava las virtudes que mantienen el estilo de vida burgués.
Cuando los ahorros se están desvaneciendo, ser cauteloso puede llevar a la ruina. Es la persona que pide grandes prestamos y que no le tiene miedo a declararse en bancarrota la que sobrevive y prospera.
Cuando el mercado laboral es volátil, no son aquellos que cumplen cabalmente con las obligaciones de su trabajo quienes tienen éxito, sino los que siempre están listos a intentar algo nuevo que aparenta ser más prometedor.
En una sociedad que está siendo transformada continuamente por las fuerzas del mercado, los valores tradicionales son disfuncionales y quien quiera vivir de acuerdo a ellos está en riesgo de terminar en la caneca de la basura.


Se desvaneció en el aire
Examinando un futuro en el que el mercado permea todas las esquinas de la vida, Marx escribió en el Manifiesto Comunista: "todo lo que es sólido se desvanece en el aire". Para alguien que vivió en la Inglaterra victoriana temprana -el Manifiesto fue publicado en 1848- era una observación asombrosamente visionaria.
Marx fue el coautor de "El Manifiesto Comunista" con Friedrich Engels.
En esa época, nada parecía más sólido que la sociedad en cuyos márgenes vivía Marx.
Un siglo y medio más tarde, vivimos en el mundo que él anticipó, en el cual la vida de todos es experimental y provisional, y la ruina súbita puede llegar en cualquier momento.
Unos pequeño puñado de gente ha acumulado vastas riquezas pero incluso eso tiene una cualidad de evanescente, casi fantasmal.
En los tiempos victorianos, los verdaderamente ricos podían darse el lujo de relajarse, si eran conservadores a la hora de invertir su dinero. Cuando los héroes de las novelas de Dickens finalmente reciben su herencia, no vuelven a hacer nada jamás.
Hoy en día, no existe un remanso de seguridad. Los giros del mercado son tales que nadie puede saber qué mantendrá su valor, ni siquiera dentro de unos pocos años.


No fue el mayordomo
Este estado de alteración perpetua es la revolución permanente del capitalismo y yo pienso que nos acompañará en cualquier futuro imaginable realísticamente.
Estamos apenas a mitad de camino de una crisis financiera que pondrá muchas cosas de cabeza.
Monedas y gobiernos probablemente caerán, junto con partes del sistema financiero que creíamos seguro.
No se ha lidiado con los riesgos que amenazaban con congelar a la economía mundial hace apenas tres años. Lo único que se ha hecho es obligar a los Estados a asumirlos.
No importa qué digan los políticos sobre la necesidad de frenar el déficit, deudas de la magnitud de las que se han incurrido no pueden ser pagadas. Es casi seguro que lo que harán es manejarlas recurriendo a la inflación, un proceso que está abocado a ser muy doloroso y empobrecedor para muchos.
El resultado sólo puede ser más agitación política, a una escala aún mayor.
Pero no será el final del mundo, ni siquiera del capitalismo. Pase lo que pase, vamos a seguir teniendo que aprender a vivir con la energía errática que el mercado emanó.
El capitalismo llevó a una revolución pero no la que Marx esperaba. El exaltado pensador alemán odiaba la vida burguesa y pensó en el comunismo para destruirla.
Tal como predijo, el mundo burgués ha sido destruido.
Pero no fue el comunismo el que cometió el acto.
Fue el capitalismo el que mató a la burguesía.

jueves, 12 de abril de 2012

LA DIVINA COMEDIA

Dante Alighieri (Florencia, c. 29 de mayo de 1265 – Rávena, 14 de septiembre de 1321), fue un poeta italiano. Su obra maestra, La Divina Comedia, es una de las obras fundamentales de la transición del pensamiento medieval al renacentista. Es considerada la obra maestra de la literatura italiana y una de las cumbres de la literatura universal.
 En italiano es conocido como "el Poeta Supremo" (il Sommo Poeta). A Dante también se le llama el "Padre del idioma" italiano. Su primera biografía fue escrita por Giovanni Boccaccio (1313-1375), en Trattatello in laude di Dante.
Participó activamente en las luchas políticas de su tiempo, por lo que fue desterrado de su ciudad natal. Fue un activo defensor de la unidad italiana. Escribió varios tratados en latín sobre literatura, política y filosofía. A su pluma se debe el tratado en latín De Monarchia, de 1310, que constituye una exposición detallada de sus ideas políticas, entre las cuales se encuentran la necesidad de la existencia de un Sacro Imperio Romano y la separación de la Iglesia y el Estado. Luchó contra los Gibelinos de Arezzo. La fecha exacta del nacimiento de Dante es desconocida, aunque generalmente se cree que está alrededor de 1265. Esto puede deducirse de las alusiones autobiográficas reflejadas en La Vita Nuova.


Dante escribió “La Divina Comedia” en 1304 y terminó de escribirla poco ante de morir en el año de 1321, en realidad no se sabe la fecha exacta, pero es la fecha más cercana.
La obra tiene un estilo llano que es empleado por Virgilio y otros poetas épicos clásico, el sentido literal de la comedia no es otra que la narración de un viaje a los mundos sobrenaturales.
Es un poema alegórico basado en la carmogonía cristiana medieval, éste contiene cien cantos de tercetos en decasílabas, dividido en treinta y cuatro poemas para el infierno, el cual describe como una montaña en forma de cono invertido situado en el hemisferio boreal cerca de Jerusalén.
Los poemas que corresponden al infierno están divididos en nueve círculos, que van estrechándose hasta el centro de la tierra donde vive Lucifer, en éste recorrido Dante es acompañado por Virgilio quien es su salvador y guía, ya que para Dante él tiene grandes dotes poéticos, es pulcro de su lenguaje en insuperable armonía de sus versos y la brillante voz de su narración hacen pensar a Dante que es el símbolo de la razón, y por eso es el mejor personaje que pudo acompañarlo.
La comedia es un genero de composición poética distinto a todos los demás, porque la tragedia del principio es admirable y tranquila, pero al final el desenlace resulta triste y horrible.
Utilizó treinta y tres cantos para el purgatorio siendo ésta la segunda parte de la obra, aquí las almas tienen que hacer este recorrido para purificarse de sus pecados y así poder llegar ente la presencia de Dios,  Virgilio deja de ser el guía de Dante y da paso a Beatriz quien es la que lo guiará en el paraíso, ella represento para Dante la fe.


EL INFIERNO

Canto I   Prólogo general.-  Dante se encuentra extraviado en una selva que representa la vida pecaminosa del ser humano, camina por una rampa que representa la virtud, en éste recorrido por el infierno, lo acompaña y guía Virgilio quien Dante reconoce como el símbolo de la razón y así comienzan su recorrido.

 Canto II  Prólogo del infierno.- Se describe la misión de Virgilio, Dante tiene dudas sobre lo que vivía, Virgilio le da ánimo para seguir, cuando aparecen tres damas benditas que son las que ruegan por el regreso de Dante.

 Canto III  Puerta del Infierno.- En esta parte del infierno se encuentran las personas que pasaron por la vida sin dejar huella, Carón es el barquero del infierno y el que da paso a Aquerante, lugar donde habitan estas personas.

A partir de los siguientes cantos el INFIERNO esta dividido en nueve niveles que se van estrechando hasta el centro de la Tierra, donde vive Lucifer y Dante con su compañero van descendiendo por los círculos infernales.

 Canto IV Primer círculo en el que se encuentra el LIMBO, donde se encuentran las personas que murieron sin conocer la fe.

 Canto V  Segundo círculo en el que se encuentran los lujuriosos y pecadores de la carne. En éste se encuentra Minos uno de los tres jueces del infierno quien custodia ese círculo.

 Canto VI.- Tercer círculo en el que se encuentran los glotones, menciona a Cerbero perro de tres cabezas, que guarda las puertas del infierno y la cruel condena de los que ahí están sumergidos.

 Canto VII.- Cuarto círculo en el que se encuentran los avaros y pródigos y la descripción de Virgilio de lo que es la verdadera fortuna, la cual relaciona con un ángel que Dios le ha dado para equilibrar todo.

 Canto VIII.- Quinto círculo en el que se encuentran los coléricos y perezosos, aquí también se refiere a que los demonios se oponían a que siguieran su camino.

 Canto IX.- A las puertas de Lucifer, se refiere al temor de Dante por las tres furias que representan la venganza celestial y los remordimientos de la conciencia. Encuentra un mensajero celestial que es el que les abre el camino para seguir adelante.

 Canto X y XI.- Sexto círculo en el que se encuentran los herejes y desvergonzados, está el rincón de los que aman los placeres sensuales y la tumba del Papa Anastasio describe la distribución de los condenados en el infierno.

 Canto XII al XVII.- Séptimo círculo en los que se encuentran los violentos  divididos en tres recintos, el primero describe a los violentos contra el prójimo y sus bienes, los tiranos que viven de sangre y de rapiña, en el segundo recinto se encuentran los violentos contra ellos mismos esto es los suicidas y en el tercer recinto se encuentran los violentos contra Dios, los blasfemas, los intelectuales, las usureras violentas contra el arte y los violentos contra el espíritu del hijo de Dios.

 Canto XVIII al XXX.- Octavo círculo en el que se encuentran a los engañadores divididos en diez fosas, en la primera fosa se encuentran los rufianes y seductores, en la segunda fosa se encuentran los adúlteros y cortesanos, en la tercera fosa se encuentran los simoniáticos, en la cuarta fosa se encuentran los adivinos y hechiceros, en la quinta fosa se encuentran los que trafican con cargos públicos, en la sexta fosa se encuentran los hipócritas, en la séptima fosa se encuentran los ladrones, en la octava fosa se encuentran los que aconsejan el fraude, en la novena fosa los escandalosos y cismáticos y en la décima y última fosa se encuentran los falsarios, los alquimistas, los simuladores y los falsificadores de monedas.

 Canto XXXI al XXXIV.-  Noveno círculo en el que se encuentran los traidores y a su vez se dividen en tres grupos, en el primero están los traidores a sus propios parientes, en el segundo se encuentran los traidores a su ciudad y en el tercero se encuentran los traidores a sus bienhechores.
  

EL PURGATORIO

 Canto I.-   Prólogo al purgatorio.- 2do.  Reino donde se purifica el espíritu y se hace digno de subir al cielo. Después de abandonar el carro que lo condujo descubre a un anciano a su lado, le pregunta que hacia ahí, después de explicar su presencia y suplicar que se le permitiera ir por los siete caminos, él y su guía llegaron a una playa desierta.

 Canto II.-  El ante purgatorio: En la playa estando en la orilla del mar distinguieron unas formas blancas que pertenecían al Ángel de Dios, en la barca que venían traía consigo a más de cien espectros, a una señal de la cruz que hizo el Ángel todos se lanzaron a la playa preguntando por el camino a la montaña, pero al darse que ahí había un ser vivo, que respiraba se agruparon alrededor de él, pero inmediatamente  se dejo escuchar una llamada de atención diciéndoles el porque no se iban a purificar para que Dios se pudiera manifestar.

 Canto III.-   El ante purgatorio: En la playa un grupo de almas se sorprende al ver un cuerpo humano que causa que la luz del sol aparezca cortada en el suelo y las almas piden que camine delante de ellos para subir esa montaña.

 Canto IV.-    El ente purgatorio: Primer jirón de la montaña, continua el fatigoso andar de la montaña y un pequeño descanso antes de continuar su andar.

 Canto V.-     El ante purgatorio: Segundo jirón de la montaña, nuevamente las almas se admiran de la luz que se intercepta por el cuerpo de Dante y varias almas van a preguntar acerca de esa gracia; pero ellos siguen caminando. Las almas dicen haber tenido muertes violentas pero se arrepintieron en el último momento.

 Canto VI.- El ante purgatorio:   Segundo jirón de la montaña, llega al encuentro de ellos un alma inmóvil y solo ella les mostrará el camino más corto, se trata de  Sordello.

 Canto VII.-  El ante purgatorio: El valle de los príncipes negligentes, continua la conversación con Sordello, explicando como fue que paso por todos los círculos del reino del llanto, él servirá como guía.

 Canto VIII.-  El ante purgatorio:  El valle de los príncipes negligentes. Sordello plática con dos ángeles enviados por María, resguardan el valle contra la serpiente, y la admiración que tienen al ver la gracia de Dios que le permite a Dante ir reconociendo todos los lugares.

 Canto IX.-   Del ante purgatorio a la entrada del purgatorio, después de haber despertado de su sueño, Dante y su guía le dice que ya ha llegado junto al purgatorio, llegando a una brecha que divide a un muro, se ve una puerta por la cual se suben tres grados de diferentes colores; encontrándose un portero que no decía palabra alguna.
 Después les pregunta, qué quieren y quién guiaba sus pasos, ellos explican y dicen que una dama del cielo les indicó que subieran las tres gradas y que al ir subiendo por estos le indica su protector ir pidiendo humildemente que se abra la cerradura. El ángel de Dios traza con la punta de su espada en la frente de Dante “siete P”  diciendo que cuando esté adentro lave esas manchas y le dijo “cuando una de estas llaves falsea y no gira con regularidad por la cerradura la entrada no se abre”, pero les advierte que el que mira hacia atrás vuelve a salir.

 Canto X.-  El purgatorio: Primera terraza: Los orgullosos han entrado y sus pasos son lentos por el cuidado que se tiene al caminar. Hay esculturas esculpidas de los orgullosos, la condición de sus tormentos los hace inclinarse hacia el suelo como gusanos.

 Canto XI.-  Primera terraza:  Los orgullosos continúan el camino, hay almas de los orgullosos y los caminantes piden a Dios por ellos, continua el viaje.

 Canto XII.-  Primera terraza: Los orgullosos, una hermosa criatura viene al encuentro de ellos, les muestra el camino para subir unas gradas, ahí agita sus alas sobre la frente de Dante, al subir por la escalera Dante se siente más ligero y su guía le explica que a medida que vayan borrando las “P” en su frente sus pies le obedecerán tan sumisamente a su voluntad y Dante nota que en su frente quedan seis “P”.

 Canto XIII.-   Segunda terraza: Los envidiosos, llegan a lo alto de la escalera y inician su recorrido, cuando sienten que a su alrededor vuelan espectros que no ven. Rogaron a María a Pedro y a todos los santos por ellos.

 Canto XIV.-  Segunda terraza: Los envidiosos, siguen su camino y continúan encontrando almas que en vida fueron envidiosas.

 Canto XV.-  De la segunda a la tercera terraza: Dante siente un resplandor que lastima sus ojos, y su guía le dice que se trata de un mensajero del cielo que viene a invitarlo a subir al siguiente círculo.

 Canto XVI.-  Tercera terraza: Los iracundos, encuentran espíritus que van desatando la ira y que estaban envueltos en una nube de humo.

 Canto XVII.-  De la tercera a la cuarta terraza: Al salir de la nube de humo, se interrumpen las visiones de Dante, el examinar el lugar donde él se encuentra. Hay un espíritu divino que se oculta en su propia luz aquí en este círculo, se purifica el amor del bien que no ha cumplido su deber.

 Canto XVIII.-  Cuarta terraza:  Los perezosos, continua la teoría del amor cuando el alma ha sido creada con predisposición al amor y se lanza a todo lo agradable y también se comienza a hablar de la pereza.

 Canto XIX.-  Cuarta terraza:  Los perezosos, continúan su camino encontrando un alma que pena por haber sido en vida un avaro.

 Canto XX.-  Quinta terraza: Los avaros y los pródigos, aquí nos relata las facetas de los avaros y de los que en vida fueron pródigos.

 Canto XXI.-  Quinta terraza: Los avaros y pródigos, aparece una sombra la cual saluda a los viajeros, les comienza a preguntar pero el guía de Dante explica la razón por la cual fue sacado del infierno.

 Canto XXII.- De la quinta a la sexta terraza: El ángel que los dirigió  hacia el sexto círculo borro otra mancha de la frente de Dante y le dijo: ”Bienaventurados los que cifran sus deseos de la justicia”. Aparece el árbol de la tentación.

 Canto XXIII.-  Sexta terraza: Los glotones, están presentes las almas que se entregaron al vicio de la gula y la pena que arrastran.

 Canto XXIV.-  Sexta terraza: Los glotones, continúan los  glotones contando sus desventuras, aparece el segundo árbol de la tentación.

 Canto XXV al XXVII.-  Séptima terraza: Los lujuriosos, espíritus andando por las llamas, encuentran almas que dan paso a la lujuria gritando “Viva Sodoma y Gomorra”, se presenta el ángel de la castidad y Dante se encuentra en el alumbrar del paraíso.

 Canto XXVIII.- Dante te encuentra en el paraíso terrenal y se le explica toda la belleza extraordinaria del lugar, por medio de Matilde una mujer solitaria.

 Canto XXIX al XXXIII.-  El paraíso terrenal; La presencia de siete candelabros y veinticuatro personajes vestidos de blanco coronados con azucenas cuatro animales coronados de hojas verdes y cada uno tenía seis alas con plumas llenas de ojos, un carro triunfal sobre dos ruedas llevando por un grifo y tres mujeres danzando al lado de la rueda derecha roja y la otra color esmeralda y la tercera como la nieve y a la izquierda cuatro danzando gozosas vestidas de púrpura seguidas de siete ancianos coronados de rosas y vestidos de blanco.
Beatriz continua con sus reproches, los remordimientos de Dante ante la infidelidad, la procesión nuevamente se aleja, Beatriz se queda como guardián del carro de la iglesia, Beatriz le da una serie de advertencias a Dante y también explica las vicisitudes que sufrió el carro de la iglesia y Dante se dispone a subir a las estrellas.

EL PARAÍSO

 Canto I.-  Prólogo del paraíso.- La gloria de aquel que todo lo mueve se difunde por el Universo. Dante invoca a Apolo para que éste lo llene de valor. Dante continua admirando su asenso al Paraíso; y por lo cual Beatriz le llama la atención diciéndole “No debes pues, a lo que pienso, admirarte mas más de tu ascensión. Lo más maravilloso en ti sería que, libre de todo obstáculo te hubieras sentado abajo, como lo sería el que la viva llama permaneciese quieta y apagada a la Tierra.

 Canto II al V.-  Primer cielo, el de la luna: las almas que no cumplieron sus votos.
Dante nos advierte que por el agua donde sigue jamás fue recorrida, Minerva sopla en su vela y Apolo lo conduce a las nueve musas que le enseñan las osas, también manifiesta la maravillosa sensación de penetrar en la luna refiriéndose a esta como una margarita que lo recibió dentro de sí. Beatriz explica que las manchas que presenta la luna son las diferentes virtudes.    
Dante ve imágenes debilitadas y creyendo que no existirán continuo su camino junto con su guía (Beatriz) pero ella le dijo que en realidad eran sustancias que habían faltado a sus votos y le dijo que les creyera todo cuanto le dijeran pues la verdadera luz que las acogía evita que tuerzan sus pasos. Aquí las almas se encuentran en una esfera muy lenta y a estas almas la virtud de la calma las calma. Dante comprende ahora porque todo en el cielo es paraíso y pregunta ¿ si es posible satisfacer un voto con alguna buena obra? A lo cual Beatriz responde que si cree que puede hacer buen uso de lo que ya ha ofrecido, es como si quisiera hacer una buena obra con una cosa mal adquirida y Dante encuentra a un alma resplandeciente que le habla y que se esconde dentro de su mismo fulgor.

 Canto VI y VII.-  Segundo cielo. El de mercurio: Las personas que practicaron el bies por conseguir honor y fama. Nos habla de algunos personajes que encaminaron con sus palabras a la verdadera fe y como Dios los ayudaron a realizar grandes obras y Beatriz explica a Dante porque el hombre necesitó que Dios mandara a su hija para salvarnos del pecado.

 Canto VIII y IX.-  Tercer cielo. El de venus: Las almas que estuvieron sujetas al amor. En este cielo se menciona al amor, Dante al pasar a este cielo ve más hermosa a Beatriz, habla de porque los hijos tienen diferentes caracteres a los de los padres, que si el hombre se apoyara en los cimientos de la naturaleza habría mejores habitantes en él y de las maldiciones de los papás que solo piensan en el dinero.

 Canto X al XVI.-  Cuarto cielo. El del sol: Las almas de los sabios: Nos muestra la gran sabiduría de Dios al crear el mundo, Dante asciende al sol y Beatriz le dice: da gracias al sol de los ángulos que por su bondad te ha elevado a este sol sensible. Aquí hay mas espíritus vivos y triunfantes.
 Dante encuentra a unas santas luces que cantaban y danzaban después de terminar se refirieron a ellos, felicitándose de pasar de uno a otro lado y que los hombres no deben aventurarse a los juicios. Nos manifiesta el gozo y el resplandor después de la resurrección de la carne, se dice que cuando nos revistamos de la carne gloriosa y santa nuestra persona será mucho más grata a Dios y que el que toma su cruz y sigue a Cristo todo será mejor.   

   Canto XV al XVIII.-  Quinto cielo. El de marte: Las almas que ha combatido por la fe. Dante se complace al encontrar a su tatarabuelo al que le pregunta por su infancia, le pide que le aclare a su futuro destierro, le dice que abandonará todas las cosas que más ame y que este será el primer dardo que arroje al arco del destierro, probará cuán duro camino es el pan ajeno y lo que mas grabará se espaldas será la compañía estúpida y malvada pero agrega: Tu primer refugio será la cortesía de Lombardo. Beatriz le dice a Dante que son bienaventurados los espíritus que allá abajo antes de venir al cielo alcanzaron gran renombre con sus acciones. Dante se da cuenta que el hombre que obro bien advierte que de día en día el aumento de su virtud. Dante vio unas luces que formaron cinco veces siete vocales y consonantes formando la siguiente frase “Diligite Jiatitiam” y las ultimas fueron  “qui judacatis terram” y después estas mismas luces al chocar formaron la cabeza y el cuello de un águila y los demás bienaventurados terminaron por formar el cuerpo del águila, todo esta formación provino de que la M final se transforma en flor de lis y águila imperial.

  Canto XIX y XX.-  Sexto cielo. El de marte: Los justos y piadosos. El águila imperial le dice a Dante que por haber sido justo y piadoso está aquí exaltado hasta esta gloria y que no se deja  vencer por el deseo y sigue diciendo; que en la tierra dejo tal memoria de él, que los hombres más perversos la recomiendan pero no siguen el ejemplo. Dante hace hincapié sobre que sin fe y sin obras no hay salvación.
Después de haber visto las brillantes luces que adornaban la sexta estrella el águila real le explica las diferentes almas que forman su ojo - pupila está en medio y fue el cantor del espíritu santo encargado de transportar el arco de ciudad en ciudad, de los cinco que forman el arco de mi ceja el más próximo al pie conoce cuan caro cuesta no seguir a Cristo, el que le sigue en la parte superior de la circunferencia conoce que los eternos juicios de Dios son invariables aunque una ferviente oración consigue allá abajo que suceda mañana lo que debería suceder hoy, el otro guiado por una buena intención que produjo malos frutos conoce que el mal resultado de su buena acción no le es nocivo por mas que haya sido su destrucción, el que esta en el declive del arco conoce ahora el amor del cielo hacia un rey justo y lo manifiesta por el resplandor que lo rodea.
 También se le dice que Dios abrió sus ojos a nuestra redención futura y le menciona a las tres mujeres que estaban junto a la rueda derecha del carro le bautizaron mas de mil años antes de que se instituyera el bautismo.

Canto XXI y XXII.-  Séptimo cielo. El de saturno: Los contemplativos. Dante cada vez que ve el rostro de su amada lo ve mas bello, ella le explica que brillara mas su rostro cuando mas se ascienda por las gradas del eterno palacio. Después el observa una escala del color del pro y tan elevadas que no podrían sus ojos seguirla y por ahí bajaron muchos resplandores, el que se quedo cerca de ellos comenzó a resplandecer mucho y él pregunta ¿quién es? Y comienza a decirle que era Pedro Damián el cuenta su vida y se hace una crítica del lujo y malicia delos prelados.
 Cuando su guía observó cien esferas tenía miedo preguntar cuando la mayor de las perlas se adelanto hacía Dante para detener su curiosidad, ella habla de la caridad y señala a unos fuegos que fueron hombres contemplativos es decir aquellos que abrazan aquel ardor que hace nacer las flores y frutos santos, Dante le pide ver su rostro descubierto pero el le explica que solo su deseo se realizará en la última esfera donde todos son perfectos, maduros y enteros. Se menciona la corrupción de los monasterios.

 Canto XXIII al XXVII.-  Octavo cielo. El de las estrellas fijas: Triunfo de CRISTO. Dante y Beatriz se encuentran en la legión del triunfo de Cristo y todo el fruto recogido de la rotación de estas esferas. Dante sigue maravillado con la belleza de Beatriz y no percibe el hermoso jardín que florece bajo los rayos de Cristo por lo cual ella le llama la atención así mismo Cristo y la Virgen María se remontan al Empíreo. Se le hace un examen de fe a Dante comenzando por preguntarle ¿que es la fe? Es la sustancia de las cosas que se esperan y el argumento de las que no aparecen a nuestra mente, pero él sigue preguntando ¿por qué la colocan entre las sustancias y no entre los argumentos? Porque las cosas que aquí se manifiestan claras y patentes en la creencia sobre que se funda la alta esperanza por eso se toma el nombre de sustancia. Dante sale bien de la prueba y es bendecido. Santiago apóstol examina a Dante sobre la esperanza, a lo que el contesta, La esperanza es una expectación cierta de la vida futura, producida por la gracia divina y los meritos anteriores. Hay una aprobación general y Dante trata de ver el cuerpo del santo ( San Juan ) lo que momentáneamente siega a Dante a pesar de que Beatriz esta a su lado.
Nuevamente es examinado pero ahora sobre la cavidad, recibe el aplauso de los elegidos y recobra la vista aquí encuentra a Adán dándose una explicación del porque fue desterrado no por comer la fruta del árbol prohibido si no por haber infringido la orden. Los bienaventurados cantan un himno, se menciona la corrupción general del hombre y sus causas.

 Canto XXVIII  y XXIX .- Noveno cielo o primer móvil. Dios y los ángeles. Menciona que simultáneamente fue creado y establecido el orden de las sustancias, el producido en acto puro están en la cima del mundo, y el inferior es destinado a la potencia pura y el medio unió a la potencia y acción, la causa del que mora ahí en el centro de la tierra fue el orgullo.
 Canto XXX al XXXIII.-  Décimo cielo o Empíreo: Dios, ángeles y bienaventurados.

Ha desaparecido el punto luminoso y los coros angélicos desisten de seguir cantando la belleza de Beatriz. Ya han salido del mayor de los cuerpos celestes para subir al cielo que es pura luz. Aquí el amor tranquiliza , Dante siente elevarse de un modo superior a sus fuerzas. Dante contempla la viva luz, y voltea a ver a su dama, pero en su lugar hay un anciano vestido como la familia gloriosa, el le indica que vea el tercer circulo a partir de la grada superior y ahí esta Beatriz que por su merito ha ocupado este trono. Dante la invoca pidiéndole le mantenga su alma sana, el anciano que es San Bernardo le dice que el lo llevara a feliz termino de su viaje, Dante ve como mil ángeles festejan , ve sonreír una beldad, el anciano explica la distribución de los elegidos en la Rosa, debajo de Maria se encuentran en el orden que forman los terceros puestos, Raquel, Beatriz, Sara, Rebeca, Judith y la bisabuela del cantor y desde la séptima grada para  abajo se suceden las Hebreas, dividiendo las hojas de la flor y en la parte en que están provista  de todas las hojas están los que creyeron en la venida de CRISTO  y en los semicírculos interrumpidos por huecos, están los que creyeron en  él después de haber venido y en los otros escaños inferiores que forman gran separación esta Juan siempre santo que sufrió la soledad y el martirio y debajo de el esta Francisco y debajo de éste Benito y otros varios y en la grada que corta por mitad  ambas filas hasta bajo nadie se sienta por su propio merito  porque son espíritus  desprendidos de la tierra. Aquí en este reino los asientos no son dados por casualidad, tampoco cabe la tristeza  la sed  ni el hambre. Le dice que  en los primeros siglos bastaba con tener la inocencia y la fe de los padres para salvarse. Maria es glorificada por Gabriel y los demás ángeles.
San Bernardo hace una plegaria a la Virgen para que Dante pueda contemplar el sumo placer, y su plegaria ha sido escuchada y Dante fija su mirada en la luz divina. Fin de la visión .




El Efecto Mariposa (Imaginantes) LA LEY DE CAUSA Y EFECTO.




LA LEY DE CAUSA Y EFECTO



«Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo ocurre de acuerdo con la ley. Azar no es más que el nombre que se le da a la ley no reconocida; hay muchos planos de causalidad, pero ninguno escapa a la ley.»
El Kybalion.

EL Sexto Gran Principio Hermético —el principio de Causa y Efecto— encierra la verdad de que nada sucede casualmente; que la casualidad es sólo un término que indica la existencia de una causa no reconocida o percibida; que el fenómeno es continuo, sin soluciones de continuidad. El Principio de Causa y Efecto está tras todo pensamiento científico, antiguo o moderno, y fue enunciado por los Instructores Herméticos de los tiempos primitivos.

Y si bien han surgido muchas discusiones y disputas entre las varias escuelas de pensamiento, esas disputas han versado especialmente sobre los detalles de la operación del citado principio, y también sobre el significado de determinadas palabras. El inmanente principio de Causa y Efecto ha sido aceptado como correcto por todos los pensadores del mundo que merecen realmente tal calificativo. Pensar de otra manera sería sacar el fenómeno del universo del dominio de la ley y del orden, relegándolo a ese algo imaginario al que el hombre ha dado el nombre de casualidad. 

Un poco de meditación evidenciaría que no existe absolutamente tal casualidad. Webster define la palabra casualidad diciendo que: «es un supuesto agente o modo de actividad diferente de una fuerza, ley o propósito; la operación o actividad de dicho agente; el efecto supuesto de tal agente; un suceso, una cosa fortuita, una casualidad, etc.». Pero un poco de meditación demostrará que no puede existir dicho agente casual, en el sentido de algo externo y fuera de la ley, algo aparte de la causa y del efecto.

¿Cómo podría existir algo actuando en el universo fenomenal, independiente de las leyes, del orden y de la continuidad del último? Tal agente sería algo completamente independiente del tren coordinado del universo, y, por consiguiente, sería superior a él. No podemos imaginar nada fuera del TODO, más allá de la ley, y esto porque el TODO es precisamente la ley en sí mismo. No hay sitio en el universo para nada externo o independiente de la ley. La existencia de algo semejante convertiría a todas las leyes naturales en inefectivas, y sumergiría al universo todo en el desorden más caótico.

Un examen cuidadoso demostrará que lo que llamamos casualidad es meramente una expresión concerniente a causas oscuras, causas que no podemos percibir, causas que no podemos comprender. La palabra casualidad se deriva de una frase que significa «echar los dados», siendo la idea encerrada que la caída es meramente una ocurrencia, sin relación con causa alguna. Y en este sentido suele emplearse la palabra en cuestión. Pero cuando se examina el asunto detalladamente se verá que no hay tal casualidad absolutamente en la caída de un dado. Cada vez que cae el dado mostrando cierto número, obedece a una ley tan infalible como la que gobierna la revolución de los planetas en torno del Sol. Tras la caída del dado existen causas, o cadenas de causas, eslabones en ininterrumpida sucesión, hasta donde la mente no puede alcanzar. La posición del dado en la caja, la suma de energía muscular empleada al arrojarlo, el estado de la mesa, etc., son otras tantas causas cuyo efecto puede verse. Pero, tras éstas, hay encadenamiento de causas invisibles precedentes, todas las cuales obran sobre el número que el dado debe mostrar en su cara superior.

Si se arrojan los dados un gran número de veces, se verá que los puntos marcados son casi iguales, esto es, que habrá igual número de unos, de dos, etc. Arrójese una moneda al aire, y al caer dará cara o cruz. Pero si se arroja un número de veces suficiente, las caras y las cruces se igualarán. Pero todo cae bajo la operación de la Ley de Causa y Efecto, y si pudiéramos examinar todo el eslabonamiento de causas veríamos claramente que era sencillamente imposible que el dado cayera en otra forma que en la que cayó, bajo las mismas circunstancias y al mismo tiempo. Siendo las mismas causas, se produce siempre el mismo resultado. Toda ocurrencia tiene su causa y su porqué. Nada ocurre sin causa, o, mejor dicho, sin una cadena de causas.

Al considerar este principio muchos se quedan confusos, porque no pueden explicar como una cosa puede ser causa de otra, esto es, ser la primera creadora de la segunda. En realidad, ninguna cosa puede producir o crear otra. La causa y el efecto residen meramente en los sucesos. Un suceso o acontecimiento es lo que viene, llega u ocurre como consecuencia o resultado de un acontecimiento o evento anterior. Ningún acontecimiento crea otro, sino que no es nada más que el eslabón precedente en la gran cadena coordenada de sucesos que fluyen de la energía creadora del TODO. Hay una continuidad de solución entre todos los acontecimientos precedentes, consecuentes y subsecuentes. Existe siempre una relación entre todo lo que ha pasado y todo lo que sigue. Una piedra se desprende de la montaña y se aplasta contra el tejado de una granja situada en el valle vecino. A primera vista parece obra de la casualidad; pero si se examina la materia se encontrará una gran cadena de causas tras ese acontecimiento. En primer lugar estaba la lluvia que ablandó la tierra que sostenía a la piedra, permitiéndole así caer; antes de esa causa estaba la influencia precedente del Sol y de otras lluvias, las que gradualmente fueron desintegrando la piedra de la roca; antes aún, estaban las causas que contribuyeron o produjeron la formación de la montaña y su elevación sucesiva por medio de las convulsiones de la Naturaleza, y así ad infinitum.

Además podemos revisar las causas de la lluvia, podemos considerar la existencia del tejado. En una palabra, pronto nos encontraríamos envueltos en un laberinto de causas y efectos del que pronto tendríamos que luchar para escaparnos.
Así como un hombre tiene dos padres y cuatro abuelos y ocho bisabuelos, y dieciséis tatarabuelos y así sucesivamente, de manera que al cabo de cuarenta generaciones se calcula el número de antecesores en muchos millones, así también suceden con el número de causas que subyacen tras el suceso o fenómeno más nimio, tal como el paso de un liviano trocito de carbón llevado por el viento. No es nada fácil seguir la pista de esa partícula de hollín hasta los primitivos períodos de la historia del mundo, cuando formaba parte de un macizo tronco, que más tarde se convirtió en carbón, y así sucesivamente, hasta el momento en que pasaba volando ante nosotros en busca de otras muchas aventuras. Y una poderosísima cadena de acontecimientos, de causas y efectos, la llevó hasta su actual condición, y ésta no es más que uno de los tantos sucesos de la cadena, y que seguirán produciendo más y más eventos durante centenares y centenares de años a contar desde ahora. Una de las series de acontecimientos originados por esa partícula de hollín flotante ha sido el escribir estas líneas, lo que ha obligado a un tipógrafo a realizar cierto trabajo; esto despertará en vuestras mentes ciertos pensamientos, así como en las de los demás, los que a su vez afectarán a otros, y así sucesivamente, hasta donde la mente no puede alcanzar, y todo por el simplismo vuelito de una partícula de hollín, todo lo cual muestra la relatividad y asociación de las cosas y la deducción consiguiente de que nada hay grande ni pequeño en la mente que todo lo creó.

Meditemos un momento. Si cierto hombre no hubiera encontrado a cierta mujer en la obscura Edad de Piedra, vos, que estáis ahora leyendo estas líneas, no estaríais ahora aquí. Y si, quizá, la misma pareja no se hubiera encontrado, los que escribimos estas líneas tampoco estaríamos aquí. Y el mismo hecho de que nosotros, por nuestra parte, escribamos, y de que vos leáis por la vuestra, afectará no solamente nuestras propias vidas, sino que también tendrá un efecto directo o indirecto sobre muchas otras personas que viven actualmente o que vivirán en las edades por venir. Todo pensamiento generado en nuestra mente, todo acto realizado, tiene sus resultados directos e indirectos, que se eslabonan coordinadamente en la gran cadena de Causas y Efectos.

No deseamos entrar a discutir sobre el libre albedrío y el determinismo, en esta obra, por múltiples razones. Entre otras muchas, la principal es que ningún lado del asunto es completamente exacto, siendo en realidad ambos parcialmente verdad, de acuerdo con las enseñanzas herméticas. El Principio de Polaridad demuestra que ambos aspectos son medias‑verdades: los opuestos polos de la verdad. La verdad es que el hombre puede ser a la vez libre y limitado por la necesidad, dependiendo todo del significado de los términos y de la altura de la verdad desde la cual se examine el asunto. Los antiguos escritores expresaban el punto diciendo que: «Cuanto más lejana está la creación del Centro, tanto más limitada está. Cuanto más próxima está del Centro, tanto más libre está».

Los hombres en su mayoría, son más o menos esclavos de la herencia, del medio ambiente, etc., y manifiestan muy poco libre albedrío. Se ven arrastrados por las opiniones, costumbres y pensamientos del mundo externo, así como también por sus emociones, sentimientos y modalidades. No manifiestan el menor dominio de sí mismo que merezca ese nombre. Y con indignación rechazan esa afirmación diciendo: «Yo puedo obrar ciertamente con plena libertad y hacer lo que se me dé la gana; hago precisamente lo que quiero hacer». Pero no pueden explicar por qué o de donde viene el «necesito» y me «gusta». ¿Qué es lo que les hace querer una cosa con preferencia a otra? ¿Qué es lo que les hace «gustar» una cosa y no otra? ¿No hay ninguna «razón» para sus «gustos» y «necesidades»? El maestro puede transformar los «agrados y «necesidades» en otros en el extremo opuesto de su polo mental. Puede y tiene la capacidad de «querer, querer» en vez de querer porque algún sentimiento, modalidad, emoción o sugestión del medio ambiente despierte en él una tendencia o deseo de hacer tal o cual cosa.

La mayoría de los hombres es arrastrada como si fuera una piedra, obedeciendo al medio ambiente, a las influencias externas y a las modalidades, deseos y emociones internas, etc., por no hablar de los deseos y voluntades de los demás que son más fuertes. La herencia, el medio ambiente y las sugestiones los arrastran sin la menor resistencia por su parte, sin que ejerciten en modo alguno su voluntad. Movidos como las fichas en el tablero de ajedrez de la vida, desempeñan su parte y se quedan a un lado después del juego. Pero los Maestros, que conocen las reglas del juego, se elevan por encima del plano de la vida material, y colocándose en contacto con los poderes superiores de sus naturalezas dominan sus propias modalidades, caracteres, cualidades y polaridades, así como el medio ambiente que los rodee, haciéndose en esta forma directores del juego en vez de meras fichas: Causas en vez de Efectos. Los Maestros no se libran de la causalidad en los planos superiores, sino que están bajo el contralor de esas más elevadas leyes, y haciendo uso de éstas se hacen dueños de las circunstancias en los planos inferiores. De esta manera forman una parte consciente de la Ley, en vez de ser sus ciegos instrumentos. Mientras obedecen y sirven en los Planos Superiores, dominan y son dueños del plano material.

Pero, tanto arriba como abajo, la Ley está siempre en operación. No existe tal casualidad o azar. La ciega diosa ha sido abolida por la razón. Ahora podemos ver, con ojos iluminados por el conocimiento, que todo está gobernado por la ley universal y que el infinito número de leyes no es más que manifestaciones de la Única Gran Ley: la Ley que es el TODO. Es, pues, muy cierto que ni siquiera un gorrión deja de estar presente en la Mente del TODO, que hasta los cabellos de nuestra cabeza están contados, según dicen las escrituras. Nada hay fuera de la ley; nada ocurre en contra de ella. Pero, a pesar de ello, no se vaya a caer en el error de que el hombre es un autómata ciego, al contrario. La doctrina hermética dice que el hombre puede emplear la Ley contra las leyes, que lo superior siempre prevalecerá contra lo inferior, hasta que el hombre haya alcanzado aquel estado en el que buscará refugio en la LEY misma y podrá evadirse de todas las leyes fenomenales. ¿Se puede comprender el significado íntimo, interno, de esto?.


....................LAUS DEO..................................

ENGLISH

"Every cause has its effect, every effect has its cause everything happens according to law. Gaming is just the name given to the Law not recognized; there are many planes of causation, but none escapes the Law. "

The Kybalion.

THE Sixth Great Hermetic Principle-the Principle of Cause and Effect-embodies the truth that nothing happens by chance, that chance is just a term that indicates the existence of a cause not recognized or perceived, that the phenomenon is continuous, with no solutions continuity. The Principle of Cause and Effect is behind all scientific thought, ancient or modern, and was enunciated by the Hermetic Teachers of primitive times.

And while there have been many discussions and disputes between the various schools of thought, these disputes have focused especially on the details of the operation of that principle, and also about the meaning of certain words. The immanent principle of Cause and Effect has been accepted as correct by all thinkers of the world that really deserve the epithet. To think otherwise would make the phenomenon of the universe of the rule of law and order, relegating him to the imaginary something which men have given the name by chance.

A little meditation would show that there is absolutely no such chance. Webster defines the word Chance saying that "is supposed agent or mode of activity other than a force, law or purpose, the operation or activity of the agent, the alleged effect of such an agent, an event, something fortuitous coincidence and so. '. But a little meditation will show that the agent can not be casual in the sense of something outside and beyond the law, something apart from the cause and effect.

How could there be something acting in the phenomenal universe, independent of law, order and continuity of the latter? Such an agent would be completely independent of coordinated train of the universe, and therefore, would be superior to him. We can imagine nothing outside of THE ALL, beyond the law, and that because THE ALL is precisely the law itself. There is no place in the universe to anything external or independent of the law. The existence of such a thing would make all natural laws ineffective, and plunge the whole universe in chaotic disorder.

A careful examination will show that what we call chance is merely an expression relating to obscure causes, causes that we can not perceive, cause we can not understand. The word Chance is derived from a phrase that means "throw the dice", the idea being that the fall is confined merely an occurrence, unrelated cause. And in this sense often used the word in question. But when you examine the matter in detail it will be absolutely no such chance in the fall of a die. Every time I drop the dice turning up a number, it obeys a law as infallible as that which governs the revolution of the planets around the sun After the fall of the die are causes, or chains of causes, links in unbroken succession, to the the mind can achieve.The position given in the box, the amount of muscular energy used to throw, the state of the table, etc.., Are so many causes whose effect can be seen. But after these, there are chain of unseen preceding causes, all of which act on the given number to display on its upper face.

If the dice are thrown a great number of times will be seen that the marked points are almost equal, ie there will be an equal number of ones, two, and so on. DROP a coin, and will fall heads or tails. But if you throw a sufficient number of times, the heads and tails will be matched. But everything falls under the operation of the Law of Cause and Effect, and if we could examine all the causes linkage would see clearly that it was simply impossible for the die to fall in another form in which it fell under the same circumstances and at the same time As the same causes, there is always the same result. Every occurrence has its cause and why. Nothing happens without a cause, or rather, not a chain of causes.

In considering this principle many remain confused, because they can not explain how one thing can lead to another, that is, be the first creator of the second. In reality, nothing can produce or create another. Cause and effect reside merely in the events. An occurrence or event is what comes, arrives or happens as a result or outcome of an event or previous event. No event creates another, but that is nothing more than the preceding link in the great chain of events that coordinate the flow of creative energy of THE ALL.There is a continuity solution between all events precedent, consequent and subsequent. There is always a relationship between what happened and all that follows. A stone is dislodged from the mountain and crushed against the roof of a farm in the neighboring valley. At first glance it appears by chance, but if you examine the matter will be a great chain of causes behind this event. First there was the rain which softened the earth that held the stone, allowing you to fall, before that case was the previous influence of the Sun and other rains, which were gradually disintegrating the stone from the rock, even before they were the causes that contributed to or caused the formation of the mountain and its subsequent rise through the convulsions of nature, and so on ad infinitum.

We may also review the causes of rain, we consider the existence of the roof. In a word, soon we would be involved in a maze of cause and effect of which would soon have to fight to escape.Just as a man has two parents and four grandparents and eight great-grandparents, sixteen great-great grandparents and so on, so that after forty generations are calculated the number of ancestors at many millions, and also happen to the number of underlying causes the most trivial event or phenomenon, such as the passage of a light piece of coal carried by the wind. It is not easy to keep track of the soot particle until the early periods of world history, when it was part of a massive trunk, which later became coal, and so on, until the time was flying to us for many more adventures. And a powerful chain of events, causes and effects, led to its present condition, and this is just one of many events in the chain, and will continue producing more and more events for hundreds and hundreds of years as from now. A series of events caused by the floating soot particle has been the writing, forcing to a printer to do some work, this will arouse certain thoughts in your minds as well as those of others, which in turn affect others, and so on, as far as the mind can not reach, and all for the simplicity vuelito of a particle of soot, all of which shows the relativity and association of things and therefore the deduction that there is nothing big or small in the mind that created everything.

Meditate for a moment. If a man had not met a certain woman in the dark stone age, you, you are now reading this, you would not be here now. And if, perhaps, the same couple had not been found, we write these lines would not be here. And the very fact that we, on our part, write, and that you read you for yours, will affect not only our own lives, but also have a direct or indirect effect on many people who currently live or will live in ages to come. Generated every thought in our mind, any act, has its direct and indirect results, which are linked together in a coordinated manner the great chain of Cause and Effect.

We do not want get into a discussion about free will and determinism, in this work, for many reasons. Among many others, the main one is that neither side of the matter is entirely accurate, but in reality both partially true, according to the Hermetic Teachings. The Principle of Polarity shows that both are half-truths: the opposite poles of truth. The truth is that man can be both free and constrained by the need, depending on all of the meaning of the terms and height of truth from which to examine the matter. The ancient writers express the point by saying that: "The more distant is the creation of the Centre is much more limited. The closer is the Centre, the freer it is. "

Mostly men, are more or less slaves of heredity, environment, etc.., And show very little free will. They are swayed by the opinions, customs and thoughts of the outside world, as well as by their emotions, feelings and patterns. They manifest the least self-control worthy of the name. And indignantly rejected that claim, saying: "I can certainly act freely and do what I please, do exactly what I do."But they can not explain why or where it comes from the "need" and I "like". What is it that makes them want one thing over another?What makes them "like" one thing and not another? Is there no "reason" for their "tastes" and "needs"? The teacher can transform the "likes and" needs "into others at the opposite end of the mental pole. It can and has the ability to "wanting, wanting" rather than will because some feeling, form, emotion, or environmental suggestion awakened in him a tendency or desire to do such a thing.

Most of the men is drawn like a stone, obedient to environment, outside influences and arrangements, desires and inner emotions, etc., Not to speak of the desires and wills of others who are stronger. Heredity, environment and suggestions are dragged without resistance on their part, without in any way exercise his will.Moved like the tiles on the chessboard of life, play their part and stay to the side after the game. But the Masters, who know the game, rise above the plane of material life, and being placed in contact with the higher powers of their natures dominate their own rules, characters, qualities and polarities, and the environmentsurround you, making this game as managers rather than mere tokens: Causes instead of Effects. The Masters do not escape causality in the higher planes, but are under the control of those higher laws, and using these become owners of the circumstances on the lower planes. Thus form a conscious part of the law, rather than their blind instruments. As they obey and serve on the Higher Planes, dominate and own the material plane.

But, above and below, the Act is always in operation. There is no such chance or random. The blind goddess has been abolished by Reason. Now we can see, with eyes enlightened by the knowledge that everything is governed by universal law and the infinite number of laws is nothing more than manifestations of the One Great Law: Law is the ALL. It is therefore quite certain that not even a sparrow no longer present in the Mind of THE ALL that even the hairs of our head are numbered, say the scriptures. There is nothing unlawful, nothing happens against it. But despite this, not going to fall into the error of the blind man is an automaton, on the contrary. Hermetic doctrine that man can use the law against the laws, the higher will always prevail against the lower, until man has reached that state where you seek refuge in the LAW itself and may evade all laws phenomenal. Can you understand the inner meaning, internal, this?.